El coordinador provincial de IU Sevilla, Manuel Lay, acompañado por el letrado de esta formación política, Francisco Tejado, han asistido este lunes al intento de paralización del desahucio de Silvia Núñez y sus tres hijos de una vivienda en Castilblanco de los Arroyos. A la ejecución del lanzamiento judicial han asistido representantes municipales y militantes de NIVA-IU, numerosos vecinos y vecinas y miembros de la PAH.
El alcalde, José Manuel Carballar (PSOE) ha preferido echar a la calle a esta familia de un inmueble que estaba abandonado y en desuso cuando, en 2018, Silvia la ocupó tras quedarse en paro, adecentándola y convirtiéndola en habitable, incluso contratando un seguro de responsabilidad civil.
Para el coordinador de IU Sevilla, Manuel Lay, "el trabajo de apoyo humano y material de nuestro grupo municipal y de nuestra asamblea en Castilblanco ha sido extraordinario durante todos estos meses y seguro que seguirán luchando para resolver esta tremenda injusticia social“. Además, Lay desvela en su blog que "durante varios días hemos intentado convencer al alcalde de Castilblanco por tierra, mar y aire, a través de altas instancias de su propio partido, para que, al menos, dejase a Silvia pasar el verano buscando una alternativa, otro sitio, con ayuda de nuestra gente, para desalojar la vivienda pública por las buenas. Y sé, porque me lo han dicho, que al alcalde de Castilblanco en su partido lo consideran un verso suelto, que no atiende a más razón que sus 40.000 euros de sueldo”.
Por su parte, el letrado de IU Sevilla, Francisco Tejado, además de atender en el momento del desalojo, está trabajando sobre todas las opciones legales posibles para restituir a Silvia Núñez y sus hijos una solución habitacional ante “una actuación ignominiosa, ilegal, abusiva y contraria a los Derechos Humanos”, sobre todo “cuando en la localidad existen viviendas vacías, incluso en la misma avenida existe una igual que la de Silvia, a la que el ayuntamiento ha tapiado la puerta para que no se ocupe. Lo mismo que harán el miércoles cuando Silvia Núñez retire el resto de enseres, muebles, etc, que hoy no se ha podido llevar”.
Cabe recordar, según Francisco Tejado, que Silvia Núñez “ha solicitado hasta la extenuación la asistencia por los servicios sociales, la concesión de una vivienda social en alquiler, o cualquier otro modo de vida y habitación humano y adecuado. Lo que nunca ha sido respondido por los responsables municipales”.
Tal y como recoge Diario de Sevilla, “la mujer está dispuesta a acampar en la puerta del Ayuntamiento para solicitar una solución o una alternativa negociada, ya que los servicios sociales no la han atendido. Fuentes próximas a la joven creen que hay un trasfondo político en el caso, puesto que la familia ha estado recibiendo ayuda de la oposición”, refiriéndose a nuestro grupo municipal NIVA-IU.
En este mismo diario se informa de que “Silvia Núñez tiene reconocido un grado de discapacidad del 40% y tiene tres hijos, de 11, 6 y tres años. El mayor tiene diagnosticado el síndrome de Asperger”.
"El más pequeño entró en la casa cuando ni siquiera andaba. La casa estaba abandonada y yo no me niego a pagar un alquiler social. No le he quitado su vivienda a nadie", apuntaba Silvia, presa de un fuerte ataque de ansiedad tras el desahucio.