CONGRESO | IZQUIERDA UNIDA SEVILLA | CONSEJO PROVINCIAL

La reivindicando de los derechos de las y los trabajadores y la derogación de las reformas laborales, que tanta precariedad han traído, han sido un año más las protagonistas de este 1 de Mayo, que ha recorrido las calles de Sevilla.

Nuestro coordinador, Manuel Lay, junto al coordinador andaluz, Antonio Maillo y numerosos compañeras y compañeros de toda la provincia, han salido a defender a la clase trabajadora, sus derechos y a denunciar la precariedad y desigualdad que se sufre.

MANIFIESTO:

En este 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, llamamos a la movilización de los trabajadores
y trabajadoras para participar en las acciones y manifestaciones convocadas por los sindicatos
de clase, llenando las calles para luchar contra la explotación que es la causa de la precariedad, el paro
y la desigualdad social.

Consideramos fundamental que el nuevo Gobierno proceda a la derogación de las dos últimas reformas,
instrumentos legales que han sido utilizados por las élites económicas para debilitar los derechos
laborales, hacer retroceder los salarios y empeorar las condiciones laborales de quienes trabajan a
cambio de un salario.

Los bancos y las grandes empresas ya están percibiendo desde hace tiempo los beneficios
del crecimiento económico, generados tras los peores momentos de la crisis como consecuencia
de un cambio de legislación que les ha sido tremendamente favorable. Sin embargo, los salarios

continúan reduciendo su participación en la renta nacional, crece el desempleo, y los modelos de
contratación impuestos originan precariedad y temporalidad. Por otra parte, cientos de miles de
trabajadores -falsos autónomos- se ven obligados a formas de trabajo y de inseguridad laboral que
anulan los derechos conquistados por la clase trabajadora durante muchos años, sumándose así a
la situación de muchos autónomos que trabajan en malas condiciones.

Hay una recuperación inestable, y sólo se están beneficiando de ella unos pocos. Como afirman los
sindicatos de clase, “la pobreza y la desigualdad en todas sus vertientes son problemas reales en
nuestra sociedad”. Los trabajadores pobres, que aun trabajando a tiempo completo no llegan a fin de mes
y la pobreza infantil son fenómenos crecientes.


La feminización de la pobreza es clara y los contratos precarios, o lo que es peor: la contratación en
fraude de ley o simplemente sin contrato, golpean especialmente a las mujeres.

Especial atención queremos prestar en este 1 de Mayo a la situación de los trabajadores y trabajadoras
migrantes, con cuyos derechos somos especialmente solidarios. Izquierda Unida es una organización
internacionalista y se moviliza solidariamente con la situación del mundo del trabajo en España y en
el resto de los países, y muy especialmente con quienes son víctimas de las guerras de agresión.
Las recientes elecciones generales han representado el triunfo de la democracia y las fuerzas progresistas,
lo que permite revertir las políticas injustas de recortes que durante una década han provocado
el deterioro de las condiciones de vida de la clase trabajadora.

Exigimos un cambio de política que tenga en cuenta la mayoría social del país. Exigimos un cambio de modelo
productivo, hacia un modelo sostenible integrado con el medio ambiente. Planteamos un nuevo modelo de
país que abra camino a un futuro digno, a la esperanza para que los y las jóvenes tengan un proyecto de vida,
a la seguridad para que los y las pensionistas tengan pensiones adecuadas, y a que todos y todas podamos
mirar el horizonte con confianza.

Ya es el momento de cambiar la agenda de las políticas económicas y sociales, para invertir la
creciente desigualdad y para construir la más sólida democracia. Es hora de que las reivindicaciones
de la clase trabajadora constituyan el núcleo de la política en las instituciones: trabajo digno, estable
y bien remunerado; pensiones dignas y suficientes; servicios públicos de calidad, con propiedad y
gestión pública; desarrollo equilibrado y sostenible. 


Todo ello en un marco de igualdad social y libertad democrática.

¡Viva la clase trabajadora!
¡Viva el 1 de Mayo!